En estos primeros días de diciembre, mientras nos encontramos al borde del último mes del año, es natural reflexionar sobre el tiempo transcurrido y dirigir nuestra mirada hacia el futuro que se avecina. Al mirar hacia adelante, algunos pueden experimentar un cúmulo de emociones que van desde la incertidumbre hasta la esperanza, comúnmente nos preguntamos qué nos depara el próximo año.
¿Cómo enfrentamos el futuro desconocido que está a punto de desplegarse ante nosotros?
En este momento crucial, la incertidumbre puede generar sentimientos encontrados. Algunos pueden experimentar intranquilidad por aquello que no fue, por las metas no realizadas, o atónitos por la velocidad en que transcurre el tiempo, mientras que otros están llenos de anticipación, esperando las bendiciones que Dios pueda traer.
Lo cierto es que la actitud con la que recibimos el próximo año puede marcar la diferencia entre las bendiciones de Dios y las oportunidades perdidas en nuestras vidas. La actitud con la que enfrentamos el futuro y las decisiones que tomamos pueden influir en la dirección que toma nuestro destino.
Recibamos el próximo año con gratitud, humildad y determinación para enfrentar los desafíos con valentía. Al hacerlo, abrimos nuestro corazón a las bendiciones divinas y nos preparamos para aprovechar al máximo las oportunidades que se presentan en el camino. Recordemos que cada día es una nueva oportunidad para crecer, aprender y ser agradecidos por las bondades que la vida y la divinidad nos ofrecen.
Es posible que te encuentres en una encrucijada de emociones, sintiendo un poco de todo. En medio de estas reflexiones, recordemos que, independientemente de lo que nos depara el futuro, Dios conoce cada giro y vuelta que se avecina. En estos primeros días de diciembre, reflexionemos sobre el año que está por concluir y abracemos el próximo con la confianza de que estamos en las mejores manos. (Las de Dios).
En pocos días nos despediremos de este año y daremos la bienvenida un año nuevo.
Dios ha sido bueno con nosotros.
Lo mejor de caminar con Dios en la vida es que siempre existe la oportunidad de comenzar de nuevo. Dios siempre nos ofrece un nuevo día y un nuevo amanecer, sin importar lo que haya pasado.
Aplica
¿Por qué no tomarse un momento para agradecerle a Dios por el año que ha transcurrido? Reflexionemos sobre los momentos de alegría, superación y aprendizaje que hemos experimentado.
Consideremos las experiencias que nos han fortalecido y las lecciones que hemos aprendido a lo largo de estos meses. Apreciemos la guía divina que nos ha sostenido en cada paso. La gratitud nos brinda serenidad, permitiéndonos abrazar el futuro con confianza y esperanza, dediquemos un espacio para expresar nuestra gratitud y reconocimiento por la fidelidad de Dios en nuestras vidas.
2 Samuel 7:22-24 Reina Valera Actualizada Por tanto, tú eres grande, oh SEÑOR Dios; porque no hay nadie como tú ni hay Dios aparte de ti, conforme a todo lo que hemos oído con nuestros oídos.
Oremos,
Te damos gracias, Señor, por este nuevo mes que comienza. Lo ponemos en tus manos.
Señor este mes será un mes de revelaciones, un mes de transformaciones
y restauraciones en nuestros hogares, en nuestros matrimonios, en nuestros trabajos, en nuestros corazones, declaramos en el nombre poderoso de nuestro Señor Jesús, en muchos hogares que hoy claman por la restauración y la sanidad.
Danos un corazón para amarte y obedecerte en todo lo que pidas, que tu presencia se
revele en nuestras vidas, en este mes de diciembre y el resto de tiempo
que nos permitirás vivir. Señor, gracias, muchas gracias por amarnos tanto.
En el nombre de Cristo Jesús, Señor nuestro Amén.
Dios te dice hoy
Queridos hijos míos, mientras el calendario gira y un nuevo mes llega, quiero recordarles la importancia de dar la bienvenida con corazones agradecidos.
En este periodo, las luces parpadeantes y los cantos festivos pueden recordarles la luz que cada uno de ustedes lleva dentro, permitan que el amor y la compasión iluminen sus vidas y las de quienes les rodean.
Este nuevo mes es un tiempo de reflexión, de mirar hacia atrás y evaluar el camino recorrido durante el año. No se centren únicamente en los desafíos, sino también en las bendiciones que han recibido. Agradezcan por las lecciones aprendidas y por las oportunidades que les han sido dadas.
Este es un tiempo de esperanza. Miren hacia adelante con optimismo y fe. Las nuevas posibilidades y oportunidades esperan a aquellos que mantienen viva la llama de la esperanza en sus corazones.
En este periodo especial, permítanse ser instrumentos de paz y amor. Brinden alegría a aquellos que lo necesitan y compartan generosamente amor y la compasión.
Así que, queridos hijos, al comienzo de un nuevo mes, sean agradecidos, tengan fe y cultiven esperanza y amor.
Con amor eterno, Dios.
Tu consejero espiritual SergioAndres
Amen 🙏🏻 Que este mes sea para acercarnos y buscar mas de tus palabras, Senor llenanos de tu paz y fortaleza y permitenos ser un instrumentos para que otros vean el amor de Dios en nosotros .
Gracias por ser la persona que utiliza el Señor Jesús para estar conectado siempre con Él.Dios te bendiga 🙏❤️
Sergio Andrés mil disculpas por mi comentario incompleto
Quise decir y esperemos un nuevo año lleno de bendiciones 😊❤️
Gracias Dios mío , vivamos con mucha Fé y agradecemos al Padre Celestial y rsperemos
Amen 🙏🙏🙏