Dios tiene paciencia… aunque lo hayamos olvidado
- 3 may
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Querido amigo, querida amiga…Hoy no quiero hablarte como alguien que lo sabe todo, sino como alguien que también falla.Vivimos en un mundo que corre sin mirar atrás. Donde todo es urgente, superficial, desechable…Y en medio de todo eso, Dios sigue esperando.
Sí, hay maldad. En los gobiernos, en las calles, en las familias… y a veces, también en nosotros. No necesitamos mirar muy lejos para ver cuántas veces lo hemos dejado en último lugar.Y sin embargo, Él no ha desatado Su juicio.
Dios tiene paciencia.Y esa paciencia no es debilidad, es misericordia.Cada día que amanece, aunque el mundo no se lo agradezca, es una oportunidad más que Él nos da.
La pregunta es: ¿vamos a seguir posponiendo el cambio?¿Vamos a seguir ignorando al único que realmente podría sostenernos cuando todo falle?
Este mensaje no es para los perfectos. Es para los que saben que han fallado… pero que aún quieren volver.Y si tú lo sientes, entonces estás a tiempo. Porque mientras haya vida, hay oportunidad.
Oración: Señor, gracias por no rendirte conmigo
Dios mío,no vengo a fingir. He sido de los que se olvidan de Ti.He estado tan ocupado, tan distraído, tan centrado en mí, que muchas veces te he dejado en pausa.
Y aun así… me has esperado.Aun así, me has dado techo, comida, gente que me quiere.Aun así, no has dejado de protegerme, incluso cuando yo no te he buscado.
Señor, gracias por no rendirte conmigo.
Gracias por seguir tendiéndome la mano, incluso cuando he caminado en la dirección contraria.Hoy quiero volver. No con palabras bonitas, sino con un corazón que quiere cambiar.
Perdóname por dejar que el ruido del mundo apague tu voz.Perdóname por solo acordarme de ti en los problemas.Hazme más consciente de tu bondad. Hazme más agradecido. Más sincero. Más fiel.
Que cada día que me regales, lo viva con el compromiso de honrarte.Y si algún día todo se derrumba, que no me encuentre lejos de Ti.
En el nombre de Jesús, Amén.
Queridos/as,
En este mundo que avanza rápido y olvida fácilmente, os invito a hacer una pausa…y recordar que el corazón de Dios sigue latiendo por cada uno de nosotros.
Aunque haya confusión, indiferencia o injusticia a nuestro alrededor, Dios no ha cerrado Sus brazos. Su paciencia no es indiferencia, sino una muestra clara de Su amor incondicional.Nos da tiempo, oportunidades, señales. Nos da vida cuando ya no la merecíamos.
No ignores esa misericordia. No dejes pasar este día como si fuera uno más.Dios está esperándote. No con reproches, sino con esperanza de que aún puedes regresar, cambiar, levantarte y comenzar de nuevo.
Que cada gesto tuyo —por pequeño que sea— sea un reflejo de esa compasión que tú mismo has recibido.Perdona si puedes. Escucha a quien lo necesita. Da sin esperar. Y ora, aunque sea en silencio.
Recuerda: en la misericordia de Dios no solo hay consuelo. También hay propósito.Y mientras estés de pie, mientras tengas voz, mientras tu corazón siga latiendo… todavía estás a tiempo.
Con todo mi afecto,Tu consejero espiritual,Sergio Andrés
Amén.
📖 Versículo para meditar:“El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”— 2 Pedro 3:9
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