¿Por que el salmo 91 es tan poderoso?
- 28 sept
- 2 Min. de lectura
¿Por qué el Salmo 91 es tan poderoso?
No es casualidad que cuando alguien atraviesa un momento de miedo, soledad, enfermedad o peligro, sus labios pronuncien con temblor: “El que habita al abrigo del Altísimo…”
El Salmo 91 no es solo un texto antiguo: es un refugio espiritual que ha sostenido generaciones. Es un escudo invisible que nos cubre cuando todo lo demás se cae. Es esa voz en medio del caos que dice: “No temas.”
Y es tan poderoso porque no solo habla de Dios, sino con Dios. Es una conversación íntima entre el alma herida y el Padre protector. No ofrece soluciones mágicas, ofrece presencia. Y eso lo cambia todo.
Este Salmo es poderoso porque habla a los que viven al límite: al que no sabe cómo pagar las cuentas, al que recibe un diagnóstico, al que camina solo de noche, al que enfrenta enemigos ocultos, al que tiene pesadillas. Y a todos ellos les da lo mismo: paz sobrenatural.
Cada línea es una promesa que atraviesa el tiempo:
“No temerás al terror nocturno…”
“Con sus plumas te cubrirá…”
“Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra, mas a ti no llegará…”
Son palabras que no se quedan en papel. Se encarnan en tu vida. El Salmo 91 no solo se lee, se vive. Y cuando lo haces tuyo, algo cambia en ti: ya no caminas solo, no enfrentas con tus propias fuerzas, no vives con miedo.
Ese es el poder del Salmo 91: no promete que el mal no vendrá, pero sí que no te destruirá. Porque quien habita al abrigo del Altísimo, mora bajo la sombra del Omnipotente… y ahí, hermano, hermana, no hay tiniebla que entre.
Oración
Dios Todopoderoso,
me acerco a Ti hoy con el corazón expuesto, pero también confiado.
Quiero habitar bajo Tu abrigo. Quiero quedarme ahí,
donde ninguna amenaza tenga poder, donde el miedo se desvanezca.
Tú eres mi refugio y mi fortaleza.
Aunque vengan enfermedades, malas noticias, peligros que no entiendo,
yo sé que no camino solo.
Tu fidelidad es escudo, es manto, es fuego que me rodea.
Hoy me aferro a cada promesa del Salmo 91.
Haz que mi fe crezca, que mi alma descanse en Ti
y que, pase lo que pase, no me olvide que tengo un Dios
que está por encima de todo lo que me asusta.
Amén.
🎯 Conclusión
¿Sabes por qué el Salmo 91 es tan poderoso? Porque te recuerda quién es tu Dios… y quién eres tú cuando estás en Él. No es poesía: es verdad viva.
🕊️ Hazlo parte de ti. Repite sus promesas, escríbelas, grítalas si es necesario. Porque quien vive bajo Su sombra, no teme al mundo.
📩 Déjame en los comentarios tu experiencia con este Salmo. ¿Lo has vivido en carne propia?
📲 Comenta, comparte y dale like. Este mensaje puede cambiarle la vida a alguien más.
🙏 Sergio Andrés, tu Consejero Espiritual.



Comentarios